El toxoplasma Gondii es un protozooario parásito culpable de la mala fama que tienen nuestros felinos domésticos. Este parásito puede infectar a cualquier mamífero, pero la cualidad que tiene es que su desarrollo sólo puede darse dentro del gato.
Una vez que se desarrolla es en las heces fecales dónde se liberan los huevesillos llamados ooquistes capaces de infectar a otro hospedero. Por lo que para contagiarse es necesario tener contacto con las heces del gato, ya sea de forma directa o indirecta.
Cuando un animal consume alimentos contaminados con estos ooquistes, el parásito se disemina por el organismo para formar quistes, que se encontrarán principalmente en los músculos, cerebro, ojos, útero o incluso en placenta y feto en caso de ingresar a un organismo gestante.
¿CÓMO PODEMOS CONTAGIARNOS?
Lo más importante es, para que nuestro gato pueda contagiarnos es que él debe de ser portador, un gato puede contagiarse al consumir alimentos contaminados o cadáveres de mamíferos pequeños con quistes de toxoplasma, en este caso se cumplirá el desarrollo del parásito y liberará en las heces los ooquistes contaminantes, si nosotros no tenemos la higiene de lavar nuestras manos después de limpiar el arenero de nuestra mascota, podremos consumir estos ooquistes y desarrollar la enfermedad.
Otra forma de infectarnos es consumir vegetales mal higienizados. Desgraciadamente es difícil saber el estado de los vegetales que compramos, si en algún momento fueron regados con aguas contaminadas o hay riesgo de que gatos defequen en las zonas de cultivo, es muy probable que el toxoplasma se encuentre en los alimentos, por eso es muy importante desinfectar todas las verduras que consumimos.
SINTOMAS
En el caso de los gatos no siempre vamos a ver síntomas pero algunos pueden ser: Incoordinación al caminar, parálisis, uveitis, diarrea, neumonía, abortos, mortalidad neonatal, fiebre, anorexia, anemia, perdida de peso.
Es importante que si tenemos alguna gata con antecedentes de aborto o mortalidad en los recién nacidos, hagamos exámenes para descartar toxoplasmosis. De igual manera si cómo mujeres tuvimos un caso de aborto descartemos esta posibilidad y tomemos tratamiento antes de volver a embarazarnos.
PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO
Cómo pueden ver el contagio puede darse cómo cualquier otro parásito, por lo que la higiene juega un papel vital en la prevención. Siempre lavemos nuestras manos antes de consumir alimentos, tengamos en buen estado los areneros de nuestros gatos y estemos pendiente de los alimentos que consumen.
Afortunadamente sí existe tratamiento para esta enfermedad, así que a cualquier sospecha no duden en acudir a su médico. Recuerden que pueden amar a su gato sin miedo siempre y cuando estemos pendientes de su salud con los cuidados preventivos correctos.
MVZ TONATZIN MEZA
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